Formadas por la entrada del mar, son las cuevas más grandes de Mallorca con una longitud de casi 2.400 metros. En su interior, compuesto por cuatro cuevas comunicadas entre ellas, se encuentra el lago Martel, uno de los mayores lagos subterráneos del mundo.
Estas cuevas surgieron hace entre 11 y 5,3 millones de años debido a la acción del agua de lluvia. Las diferentes tonalidades que encontramos en las paredes o formaciones se deben a los minerales arrastrados por el agua al atravesar el terreno.
En su interior, innumerables y variadas formaciones naturales que invitan a dar rienda suelta a la imaginación gracias al espeleólogo E. A Martel, quien las descubrió. Además, el ingeniero Carles Buïgas se encargó de iluminarlas creando un aura ideal donde se unen cueva y agua.